Abstract:
Los cambios de carácter demográfico, económicos, socioculturales y sanitarios propician la emergencia de una nueva figura de cuidadores: el cuidador contratado, cubierto, en general, por mujeres inmigrantes. El presente artículo trata de un estudio que pretende indagar sobre esta nueva realidad, centrándose, fundamentalmente, en conocer las vivencias y emociones de las cuidadoras inmigrantes en su relación con las personas cuidadas y su entorno. El estudio, de corte cualitativo, recoge a través de testimonios directos de las cuidadoras, lo que constituye su experiencia vivida; es decir, los relatos sobre un contexto difícil y complejo, donde se cruza una doble necesidad de afecto: de una parte, la de quienes sufren el duelo migratorio, por el alejamiento de los suyos, por la dureza y la precariedad de su condición de migrantes y por otra parte, la de quienes en la vejez, más allá de la dependencia física, sufren de soledad. Se evidencia el carácter afectivo y relacional del cuidado y las aportaciones positivas de estas mujeres inmigrantes a una situación característica de las sociedades globales, y con poblaciones envejecidas.